miércoles, 11 de mayo de 2011

me necesito entero, completo. Me necesito... me necesito... quiero.

miércoles, 30 de marzo de 2011

Batalla Campal

Pocas veces me pasó. Papel, lápiz, yo. Nada... Hoja en blanco y mente tan escrita. ¿Mamarrachos? ¿Notas al margen? ¿Vagas ideas? Mis manos no coordinan, no dibujan palabras pero mi cabeza, miles. ¿Mis ganas? Muchas. ¿Mi necesidad? Escribir. ¿Por dónde empiezo cuando hay tanto para decir? ¿Cómo hago que mis manos plasmen un sólo pensamiento y no todos los que tengo a la vez? ¿Cómo vomito sin vomitar? ¿Cómo pienso sin pensar? De pronto las letras una arriba de la otra, forman jeroglíficos y no frases... oraciones. De pronto, tinta desperdiciada en palabras tachadas por tinta aún más desperdiciada. Una cruz, dos cruces, cincos... tres ideas subrayadas, dos asteriscos, flechas. Mi hoja una batalla campal de ideas. Un bollo y a la basura. Un cigarrillo y de nuevo mi mente. Vuelvo al papel y lo rescato: me había dado cuenta... !Qué bien plasmé en la hoja, la batalla campal de mi cabeza!

Merienda de muertos

Hoy nos reunimos a merendar otra vez. Rodrigo el cantante, que murió en el cumpleaños de mi primo. Ramón, el vecino, que falleció en el cumpleaños de mi otro primo y que ¡Oh casualidad!, murió su santo tocayo el día de mi cumpleaños.Y yo, que morí también en el cumpleaños de mi primo, pero año atrás.
¡Qué lindo es conocer gente nueva (relativamente)! Rodrigo y Ramón (aunque es novato) traen amigos a casa. Saludo más cariñosamente al abuelo Carlos, que murió en el cumpleaños del próximo galán de novela, la del 2028. Todos notan ese gesto, pero shh... el abuelo no es de venir mucho, se queda armandole zapatos a Olmedo allá arriba a veces y me es inevitable tal bienvenida a mi mesa.
 Escucho sus historias de vida (y las de muerte también) entre chocolatada, café, mate de algunos y el infaltable habano que fuma mi vecino en plena tarde.
"¡Qué irónica tu muerte!", me dicen todos. "Dale Emi, ¡Vos no tendrías que estar acá!", "¿Qué hacés acá Emi?, dale, ¡Largá el mate (arriba tomo mate más a menudo) y volvé!"
Uno no puede revivir muchachos. Ya "arruiné un cumpleaños un año atrás". ¿Cómo hago para solucionar eso? Matar un cumpleaños... Pasame el azúcar. Los muertos no tienen solución... y menos en los cumpleaños... ¿A quién le toca este mate?

viernes, 14 de enero de 2011

TWITTER OFF, FACEBOOK OFF, MSN OFF, BLOG OFF, CELULAR OFF, INTERNET OFF, VIAJECONVOSON.

Agua, ahogo, después de tanto mar, tanta ola, tantos remolinos, el mar, pero el de verdad.

domingo, 2 de enero de 2011

Feliz año nuevo, todos los días.

Es increíble como esperamos que un año nuevo sea diferente. Creemos que un 1º de enero puede significar aires nuevos. Un cambio. Yo lo creía hasta hace poco. Y es tan difícil escribir sin caer en las típicas frases: "Año nuevo, vida nueva", "Este año todo va a ser mejor", "El cambio empieza por uno mismo". Frases cliché. ¿Por qué no atreverse a cambiar un 20 de Marzo? ¿Por qué no atreverse a cambiar un 14 de Octubre? ¿Por qué no celebrar un año nuevo el 5 de Septiembre? Vivimos esperando a que algo cambie. Esperamos que la cuenta regresiva de ese 31 de Diciembre, se lleve todo lo malo, y tenemos la esperanza que en el primer segundo de nuestro año nuevo se inaugure nuestra vida nueva. Escribo esto para todos los que no se pueden dar cuenta, que el cambio empieza por uno mismo. Y ahí está la bendita frase. Un número en el almanaque, quizás traiga un auto (que tanto esperaste comprar), tu casa, la noticia de un embarazo, la mejor fiesta a la que hayas ido, pero no la felicidad. La felicidad no viene sola. Puede estar a la vuelta de la esquina, pero si no salís a buscarla, no va a venir sola. Cuesta aceptar que las cosas no vienen solas, que a veces das y nunca recibís nada a cambio, que el "karma" es igual al "castigo de Dios si no hacés las cosas bien" y que eso no te traería felicidad. ¡Patrañas!. Lo lindo está en dar. Lo lindo está en recibir sin esperar nada a cambio. Cambio, la palabra en cuestión, de nuevo. ¿Quién nos asegura que todo cambiará para mejor? ¿Quién tiene la certeza de lo que va a ocurrir? De que este año nuevo, de que esta vida nueva será mejor. Quien tenga la seguridad de eso por favor, que me avise. O no. Prefiero seguir viviendo esta vida incierta, porque no me condiciona a nada, y a su vez me condiciona a vivirla y disfrutarla el cien por ciento, llegando a mi felicidad. Porque YO soy el cambio, porque todos los días son el cambio, y porque todos los días, si querés, pueden ser un año nuevo.. Hoy, 3 de diciembre, te digo, ¡Feliz Año Nuevo!.. hoy todo puede cambiar.